Consulta de inmigración en Estados Unidos: inmigración familiar
La inmigración basada en la familia permite a los ciudadanos estadounidenses y a los residentes permanentes legales (LPR) patrocinar a ciertos miembros de la familia para que inmigren a los Estados Unidos, lo que garantiza que las familias puedan permanecer juntas. Este sistema se basa en el principio de la unidad familiar y ofrece una vía para que los seres queridos vivan de forma permanente en los EE. UU. a través del patrocinio legal.
El proceso comienza cuando el familiar patrocinador presenta una petición (Formulario I-130) ante el Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos (USCIS) para establecer la relación que lo habilita. Una vez aprobada, el familiar puede solicitar una tarjeta verde, ya sea a través de un ajuste de estatus si ya se encuentra en Estados Unidos, o mediante un trámite consular en una embajada o consulado estadounidense en el extranjero.
La inmigración basada en la familia se divide en dos categorías principales: parientes inmediatos y categorías de preferencia familiar. Los parientes inmediatos de ciudadanos estadounidenses, como cónyuges, hijos solteros menores de 21 años y padres, tienen visas disponibles de inmediato, lo que agiliza el proceso. En cambio, las categorías de preferencia familiar incluyen relaciones más extensas, como hermanos e hijos casados, que están sujetas a límites anuales, lo que genera tiempos de espera más largos.
La elegibilidad para el patrocinio depende del estatus migratorio del solicitante. Los ciudadanos estadounidenses pueden patrocinar a una gama más amplia de familiares que los residentes permanentes legales, quienes se limitan a patrocinar a sus cónyuges e hijos solteros. Cada caso requiere documentación detallada para demostrar la relación y la capacidad del patrocinador para apoyar económicamente a su familiar.
Para abordar la inmigración basada en la familia es necesario prestar mucha atención a las normas y los plazos. Trabajar con un abogado de inmigración experimentado puede facilitar el proceso, garantizando que las peticiones y solicitudes sean precisas y completas y abordando al mismo tiempo cualquier desafío que surja. Con la orientación adecuada, las familias pueden superar los obstáculos y lograr su objetivo de reunirse en los EE. UU.